Esta entrada más que reflexiva, que también, tiene un carácter divulgativo. A través de la mención he podido escuchar un podcast de Francesc Llorens, profesor de la Universidad Oberta de Cataluña y de la Universidad de Alicante.
Y quiero hacer un repaso sobre los principales paradigmas que acompañan al concepto de identidad digital de los centros escolares y que son la clave para configurar los centros innovadores del futuro.
La identidad digital no es unipersonal en la totalidad de los casos, bien es sabido que las grandes compañías tienen una identidad de grupo, una línea que les diferencia del resto tanto en su presencia física como virtual.
En el mundo educativo y más hablando de innovación educativa, se torna necesario dar el salto a esa identidad digital como centro escolar.
Francesc habla de como entiende la identidad digital tanto a nivel individual, como de centro o grupo.
La identidad digital está caracterizada por la presencia digital, o lo que es lo mismo, estar en la red, aparecer en ella, por la reputación, que es la percepción objetiva o subjetiva que tienen los demás, y por el posicionamiento que hace referencia al lugar en el que queda el centro en relación con otros centros educativos.
Francesc apoya que los centros educativos tienen una identidad digital próxima que incide en los docentes, las familias, los estudiantes, en definitiva, está vinculado al contexto en el que se desarrolla el día a día del centro y por otra parte, una identidad digital lejana que se vincula con las relaciones que tiene el centro con otras instituciones, centros, o elementos lejanos al contexto diario.
Ambas vinculaciones digitales han de ajustarse y proyectar la misma imagen tanto al contexto más cercano como al más lejano, lo que denomina ética digital.
La construcción de la identidad digital desde el punto de vista operativo tiene tres elementos; la estructura o conjunto de elementos que hacen posible la tecnología (servidores, hardware, software, nubes, etc.), la producción hace referencia al contenido que pretendemos transmitir digitalmente y que es lo que realmente le da valor a la identidad digital, estos pueden ser informativos, que hace referencia a la propia web del centro en la que podemos encontrar cualquier tipo de información de interés, teniendo que ser siempre clara y concisa en su elaboración, interactivos, o la intranet, donde se puede interactuar, permite rellenar documentos, formularios, en definitiva simplificar la burocracia, comunicativos, tiene que ver con la capacidad de establecer redes de colaboración con la comunidad educativa y participativos tener la capacidad de que aquello que se hace en el centro pueda tener repercusión fuera del mismo.
Y por último la difusión, que exige un diseño específico de la presencia del centro en la red, mediante la construcción de una marca en las redes sociales, la elaboración de una red personal de aprendizaje (PNL), y por último el desarrollo de estructuras digitales propias que permitan una innovación en la transmisión del conocimiento.
Como hemos visto la identidad digital en los centros educativos difiere en gran medida de la identidad digital propia, y me quedo fundamentalmente con las palabras de Francesc en cuanto establece un vínculo ético entre aquello que sucede en el entorno digital más próximo, con las pretensiones y alcance que tiene el más lejano. A partir de esto pienso que establecer una buena marca o identidad digital parte de hacer las cosas bien en el centro, que la identidad digital en el entorno más cercano sea coherente y facilite la colaboración entre los agentes educativos y una vez solventado este escollo, expandir esas ideas en la red para compartir y nutrirse del contexto más lejano.
Referencias Bibliográficas
Soro, P. (30 de agosto de 2012). Gestión de la identidad digital en centros educativos. - Conferencias - Podcast en iVoox. iVoox. https://www.ivoox.com/gestion-identidad-digital-centros-educativos-audios-mp3_rf_1401038_1.html
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