En la actualidad, la alfabetización digital ha dejado de ser una opción para convertirse en una habilidad fundamental en la vida moderna. Con el auge de la tecnología y la creciente digitalización de todo nuestro entorno, la capacidad de comprender, utilizar y evaluar la información en entornos digitales se ha vuelto esencial.
La alfabetización digital va más allá de la simple capacidad de usar dispositivos electrónicos o navegar por la web. Se trata de adquirir habilidades críticas para interactuar eficazmente en el entorno digital, comprendiendo no solo cómo usar herramientas tecnológicas, sino también cómo evaluar y gestionar la información que encontramos en línea.
La alfabetización digital comienza con la familiaridad y competencia en el uso de dispositivos ordenadores, Tablet, teléfonos móviles, etc. Esto implica entender conceptos básicos como el manejo del sistema operativo, la navegación por internet y el uso eficiente de aplicaciones.
Tras el manejo de los dispositivos móviles, saber buscar información en línea es crucial, pero también lo es la capacidad de evaluar la calidad y la fiabilidad de esa información, esto incluye comprender cómo verificar fuentes, discernir entre información veraz y falsa, y reconocer posibles sesgos.
También la seguridad digital es una parte integral de la alfabetización. Comprender la importancia de contraseñas seguras, reconocer amenazas como el phishing y proteger la privacidad en línea son aspectos clave para navegar de manera segura en el mundo digital.
La capacidad de comunicarse de manera efectiva a través de plataformas digitales es esencial. Esto incluye comprender las normas y políticas de las diferentes plataformas y utilizarlas de forma eficiente.
Crear contenido digital, ya sea en forma de texto, imágenes o multimedia, es una habilidad valiosa. La alfabetización digital implica entender cómo crear y compartir contenido de manera ética y efectiva. El mundo audiovisual lidera todos los sectores y se torna necesario desarrollar la habilidad referente a la creación de contenido digital.
Desde una perspectiva educativa este pequeño decálogo hace referencia a la competencia clave digital de la LOMLOE, persiguiendo la capacidad y habilidad del alumnado a afrontar los retos y desafíos del siglo XXI que puedan presentarse, ejerciendo una ciudadanía activa que cada vez más requiere de su participación digital.
De ahí que nuestra labor docente sea esencial. El aula es un entorno privilegiado para trabajar la alfabetización digital, contamos con un alumnado nativo digital y una gran plasticidad cerebral capaz de absorber conocimiento, todo ello en un entorno seguro y guiado con el fin de pretender un desarrollo digital sano, competente y seguro.
En conclusión, la alfabetización digital no es simplemente una habilidad; es un componente fundamental para la participación plena y exitosa en la sociedad moderna. Ser capaces de desenvolverse en la sociedad del conocimiento nos capacita para navegar con éxito en el mundo conectado de hoy. Al desarrollar y mejorar nuestras habilidades digitales, no solo nos adaptamos a la evolución tecnológica, sino que también contribuimos a la construcción de una sociedad digital inclusiva y capacitada para afrontar los desafíos del futuro.
Referencias bibliográficas
Edix, R. (2022, 27 julio). Alfabetización digital: qué es y por qué es importante. Edix España. https://www.edix.com/es/instituto/alfabetizacion-digital/
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